La recogida de este tipo de residuos se realiza mediante procedimientos específicos de recogida selectiva de tal manera que existen redes de puntos de recogida selectiva distribuidos de tal forma que sean accesibles y cercanos a los consumidores o usuarios finales.
Los puntos de recogida selectiva son los lugares que han dispuesto las entidades locales, los SCRAP, etc., para que los usuarios finales puedan entregar las pilas o acumuladores portátiles usados. Estos se clasifican de la siguiente manera:
Posteriormente, los puntos de recogida solicitan la retirada, sustitución o el vaciado de los contenedores siendo transportados hasta las plantas de tratamiento autorizado.